Primero pongámonos en situación: El Mundial llegaba a Valencia
calentito después de la polémica carrera en Sepang, donde Márquez
estorbó a Valentino y dónde esté, perdiendo los nervios, le echó de
pista. ¿Consecuencia? 3 puntos en el carné, que sumado al punto de
Misano por molestar a Jorge en su vuelta rápida hacían que tuviese que
salir último en esta última carrera.
No voy a entrar demasiado en si es justo que el TAS
quitara la sanción a Valentino, porque me parece un tema con tantas
cosas a tener en cuenta que sería demasiado extenso. Así que vamos
directamente a la carrera, o bueno, la que al menos lo fue para todos
menos para un piloto.
Empezando por Valentino, lo que hizo en el Ricardo Tormo fue una obra de
arte. En 3 curvas se había ventilado a 10 pilotos, y según iban pasando
las vueltas iba adelantando a más y más, en maniobras para quitarse el
sombrero como la del adelantamiento Pol Espargaró, o en otras donde los
que se quitaban eran sus compatriotas (para qué negarlo en el caso de
Petrucci por ejemplo). Aún así, no se puede quitar ningún mérito a lo
que hizo.
Llegó hasta la cuarta posición, lo máximo que podía hacer
y más en un circuito tan ratonero como es Cheste, y ya sólo le quedaba
esperar a que por delante las Honda adelantaran a Jorge para proclamarse
Campeón del Mundo.
Por un momento parecía que iba a ser así, Márquez muy
pegado a su rueda y Dani a no mucha distancia, sabiendo que a final de
carrera va siempre muy bien porque no castiga el neumático. Yo
personalmente pensaba que Marc sí iba a hacer esta vez su carrera y que
haría una estrategia como la de Indianápolis: quedarse segundo y a unas
10 vueltas del final tirar con el ritmo inalcanzable que tenía.
Pero las vueltas se sucedían, y Márquez seguía segundo.
De repente, Jorge empieza a bajar sus tiempos por vuelta en
aproximadamente medio segundo y Dani se acerca muchísimo, pero Márquez
sigue segundo. Dani les coge a falta de 2 vueltas y adelanta a Marc en
la salida de la curva 6, ¡y Marc le devuelve el adelantamiento de manera
muy agresiva en la siguiente curva!
Ahí se acaban las opciones y el sueño. Márquez ha dejado
claro que no quiere que Valentino gane el Mundial, y está dispuesto a no
ganar la carrera para conseguir ese objetivo.
Lorenzo cruza la línea de meta primero y gana el Mundial,
y Valentino entra por detrás en 4ª posición después de haberse marcado
una carrera impresionante. Se acaba el sueño… ¿o no?
Resulta que, en la vuelta de honor, y sé de lo que hablo
porque estaba allí en el circuito en la curva 6 (justo entre el Club de
Fans de Márquez y el de Lorenzo para mi mayor gozo), al parar Márquez a
“celebrar” ese segundo puesto con su Club, se oyen muchos abucheos, y
sin embargo cuando pasa Valentino la gente rompe en aplausos. Una
diferencia que deja claro que los allí presentes se dieron cuenta de la
carrera de vergüenza que había hecho Marc, de cómo había tirado por el
suelo el espíritu del motociclismo, y de cómo una vez más demostraba ser
un niñato (si esto se vio en el circuito, por la televisión se tuvo que
ver más claro).
Además, resulta que en el pit lane se le hizo un pasillo a
Valentino donde todo el mundo le aplaudía (yo no me enteré porque
estaba demasiado ocupado en quedarme sin voz para dejarle claro a Marc
lo que pensaba de él, aunque no me escuchase, me daba igual). ¿Esto qué
demuestra? ¿Por qué mostrarle un apoyo tan claro a un piloto cuando
acaba de perder el Mundial? Pues para mí, aparte de porque es Valentino
Rossi, es la prueba evidente de que todo el mundo se dio cuenta de que
lo que acabábamos de presenciar era una injusticia y una vergüenza al
deporte, protagonizada por un piloto español.
A Valentino en Sepang le adelantó 7 veces en las primeras
vueltas, ¿y a Jorge no es capaz de adelantarle ni una sola vez en 30
cuando encima baja el ritmo a final de carrera, pero sí a su compañero
de equipo cuando le adelanta a alta de 2 vueltas? Venga por favor.
Y a la gente a la que dice que no tuvo oportunidad de adelantar, sólo le tengo que decir esto:
Ayrton Senna dijo en 1990: “"Ser
un piloto de carreras es estar constantemente en riesgo e implica
enfrentarse a otros pilotos, y si no intentas adelantar cuando tienes
una oportunidad, ya no eres un piloto de carreras. Porque competimos y
competimos para ganar.”
Creo que no hace falta decir nada más. Esa frase de
uno de los mitos del deporte del motor deja más que claro la vergüenza
que significó para el motociclismo la carrera de Marc Márquez.
¿Lo bueno de todo esto? Que Valentino es Campeón del
Mundo de 2015 para la afición. Y esa misma afición se ha dado cuenta de que Márquez es un "piloto" que deja mucho que desear.
Y también lo bueno, y darle un toque de humor, que
es como siempre hay que intentar tomarse las cosas, es que nos ha dejado
montajes muy buenos.
(Gracias a @sweetdreams__93; @javigass37; o @Ruth_46 por subir algunas de estas imágenes que he usado)
Pese a todo, 2016 nos espera. Llevemos el 46, el número de nuestro Campeón, con orgullo. ¡FORZA VALE!
No hay comentarios:
Publicar un comentario