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miércoles, 6 de marzo de 2019

Los verdaderos hooligans del motociclismo


Si algo me ha gustado siempre del deporte, es esa sensación de que traspasa fronteras. Esa unión que puede crear en personas de diferente cultura, con vidas tan distintas. Incluso, en ocasiones, podemos ver cómo se unen dos aficiones distintas por un mismo objetivo.

Desde que tengo uso de razón me ha parecido que el uso de la nacionalidad en él es una mera cuestión de orgullo para aquellos que solo se fijan en los números, y aquellos que no son capaces de ver que precisamente la bandera no debería tener tanto protagonismo.
Por supuesto, hay deportes y deportes. Concretamente el motociclismo, es uno de esos en los que, a mi modo de ver, tiene menos cabida el nacionalismo.

Sin embargo, la triste realidad es que cada vez se radicaliza más en este sentido.



Una de mis primeras entradas en este blog fue “Nacionalismo deportivo absurdo”, y hablaba de la manipulación por parte de los medios. Y hoy en día, 3 años después, esta práctica algunos la siguen realizando, pero lo que sobre todo se percibe es que la información va únicamente enfocada a un público, y muchos estamos hartos (al menos en España que es donde vivo y de donde puedo hablar con conocimiento) de ver cómo los informativos televisivos abren una noticia de un resultado de un GP diciendo cosas como: “Los españoles han hecho un buen papel en el GP de Qatar”; o en el caso de medios especializados, que titulan las posiciones finales de unos test (en los que el más rápido ha sido un piloto extranjero): “Viñales termina segundo con Márquez y Lorenzo entre los 5 primeros clasificados”.
Estos ejemplos anteriores no son reales por la simple razón de que no quiero señalar a ninguno en concreto, pero si seguís varios de estos medios en redes sociales, podéis ver por vosotros mismos que no me estoy alejando de la realidad. Lo hemos visto, sin irnos ni siquiera ni un mes atrás, con las crónicas de los test en Superbikes donde lo único que se veía en los titulares era el nombre de Bautista. O el previo del Mundial en DAZN España donde Izaskun Ruiz habla única y exclusivamente de los españoles.

Lógicamente, sé que estos medios pueden llegar a generar más visitas o tener más audencia si dan protagonismo a los que tienen su misma nacionalidad, pero eso queda muy lejos de dejar una buena imagen, y más concretamente en España, de ser la mejor afición del mundo.
Porque si para tener más visitas, tienes que recurrir a eso, quiere decir que una gran parte de los que están generando esos click, los mayores consumidores, son gente que sigue el deporte porque hay un español al que apoyar. Y esto no es nada nuevo, todos sabemos que desde la llegada de Dani, Jorge, y sobre todo de Marc, el número de “aficionados” al motociclismo ha crecido exponencialmente, y los medios solo dan lo que más le demandan. Y esto, es muy triste.


Esta parte anterior, la de los medios, es la que puedo llegar a entender, porque detrás de ellos hay gente que tiene que vivir y pagarse sus gastos. Pero la que no voy a entender en absoluto, es a esa otra (que a veces coincide con periodistas y otras no), que en sus redes sociales hacen gala de un nacionalismo absurdo, llevado el extremo. Por poner un ejemplo claro de esto: Jaime Alguersuari (que protagoniza la imagen de esta entrada), cuyo objetivo en Twitter parece ser manchar la imagen de Valentino mientras ensalza a los que han nacido en un mismo de trozo de tierra que él. Todo esto mientras UTILIZA una forma ABSURDA de ENSALZAR las PALABRAS como si fuese más un MANÍACO que un PERIODISTA, usando MAYÚSCULAS INNECESARIAMENTE. Y no dudo para nada de todo el conocimiento de este hombre (probablemente más del doble del que llegaré a tener yo en mi vida sobre motociclismo), pero por eso mismo me parece aún más grave lo que hace.

Está claro que muchas de estas personas lo que tienen es todavía muy adentro los años de dominio de Valentino, y no pueden soportar que siga en activo y al nivel que está. Aunque lo realmente preocupante es que sean también personas que llegan a muchísima gente y que lo único que hacen es radicalizar la “afición”: Los extranjeros son caca, y los españoles muy buenos todos.
Y ese discurso simplificado (y exagerado por mi parte) lo usan como altavoz de su patriotismo. Eso sí, luego los hooligans, somos otros.

Sinceramente, creo que la verdadera afición no se fija en la bandera que porte el piloto, sino en su carácter, en su forma de ser, y en su pilotaje (entre otras cosas). Los que apoyan a un piloto por su nacionalidad, obviamente muchas veces pasan todos esos aspectos por alto.
A mí, sin ir más lejos, que soy un gran fan de Valentino, me gustan otros pilotos como Mir o Rins (españoles), Pecco (también italiano), o Miller (australiano). Cada uno por un conjunto de cosas como ya he mencionado antes. Sin embargo, los aficionados de bandera apoyan a Marc, Jorge, Mir, Rins, Rabat, etc. solo por eso, su nacionalidad, sin fijarse en nada más (porque tampoco tienen interés en hacerlo).
Y ojo, entiendo que se pueda crear un vínculo mayor con alguien con quien compartes ciertos aspectos culturales, pero permitidme dudar de que en la mayoría de los casos sepan siquiera de dónde provienen.


En definitiva, creo que se debería de dejar de mirar a las aficiones de X piloto, y hacer un poco de autocrítica para darse cuenta de quiénes son realmente los hooligans del motociclismo. Porque si no, siguiendo por este camino, nos cargaremos una de las bases del deporte, y continuaremos radicalizándolo.

Y eso sí que no beneficia a nadie.



4 comentarios:

  1. Buenos días.
    Soy Rossista, aunque no siempre lo he sido. Me explico: siempre me han gustado las carreras de MotoGP, en las que siempre he tirado por los pilotos españoles, pero sin forofismo alguno. Es más, con el único piloto español con el que he podido pecar de ser un poquito forofo ha sido con Márquez, hasta que he visto que el día menos pensado se mata él o mata a alguien (que le pregunten a Wilairot. O a Simone Corsi, que desde entonce no levanta cabeza). Desde entonces, y en vista de que Rossi tiene más fans en España que Lorenzo, Pedrosa, Márquez, Rins y Viñales (y con razón), soy Rossista, y cuando se retire, de Morbidelli, Bagnaia y Marini. De los actuales pilotos españoles de la parrilla, no me gusta ni uno. El único era Bautista, y ha acabado en Superbikes...

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  2. Y no me gustan precisamente por eso, por el forofismo que hay alrededor de ellos. No hay más que ver a Ernest Riveras glosar las andanzas de Jorge Martín, los hermanos Espargaró y en su día de Jorge Lorenzo, como si fuesen las hazañas de Hernán Cortés, aunque, claro, usando términos contemporáneos. Por eso disfruto cuando encuentro en YouTube alguna carrera narrada por Valentín Requeña. Por eso disfrutaba con los comentarios de Dennis Noyes, con su Cinta Americana y con lo que escribía en la revista Motociclismo. Por eso soy Rossista. Porque me niego en redondo a ser forofo de los pilotos españoles. Porque ninguno va dejar un legado como la Academy VR46. Porque lo que ha hecho Valentino con el mundial no lo ha hecho ni hará nadie.
    Irónicamente, mi piloto favorito no es Valentino; es Manuel Poggiali. Sí, así de raro soy...

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  3. Esta es la opinión que tengo de los pilotos españoles que han competido en el Mundial de MotoGP en 2021.
    Márquez: Un kamikaze y un cerdo como piloto. Como persona, mezquino, ruin, falso, mentiroso y cobarde.
    Alex Márquez: Su carrera profesional (y sus títulos, obviamente) se los debe a su hermano. Nunca nadie hizo tan pocos méritos propios para subirse a una Honda del Repsol Honda Team.
    Los hermanos Espargaró nunca me han caído bien. Ni Aleix ni Pol. Nunca. Ninguno de los dos.
    Alex Rins es la gran mentira. Se cree que puede ganar algo y la realidad es que nunca ha ganado nada, a pesar de estar "en la pomada" en carreras sueltas o en categorías inferiores.
    Joan Mir es el Nicky Hayden de la actualidad. Un piloto regular, que se cae poco, que gracias a esa regularidad consiguió el título que figura en su palmarés, aunque por lo menos el título sí se lo ganó por méritos propios, no como el de Kentucky, que ganó el título porque lo perdió Valentino él solito (lesión en Assen, problemas con los neumáticos, la caída de Valencia...).
    Jorge Martín: Posiblemente, el que mejor me cae, aunque tampoco me dice gran cosa. Si me cae mal es por culpa de Ernest Riveras que lo tiene en palmitas de una manera inaceptable en un narrador de MotoGP.
    Lecuona es el único por el que siento un mínimo de respeto. Lo cierto es que daba para lo que daba, aunque su final de temporada fue magnífico.
    Respecto al señor del tweet capturado, sólo decir que así es como funciona, desgraciadamente, el fandom de Márquez. Otra razón más, pues, para tenerle asco al ilerdense.
    Un saludo.

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  4. Y me olvidaba de Viñales... xD
    Bueno, de Viñales diré que es un llorón y un experto en poner excusas cuando las cosas no van como él quisiera. Todos los días le duele algo: que si la moto, que si el motor, que si el chasis, que si los frenos, que si las suspensiones, que si los neumáticos, que si la abuela fuma, que si patatín, que si patatán. Nunca ha ganado nada a pesar de tener señores pepinos por motos (debutó en 2011 con una Aprilia RSA 125. Si eso no es llegar y besar el santo...)
    Además, ha salido tarifando de Repsol-Honda, de Suzuki y de Yamaha. Ahora está en Aprilia otra vez, a ver cuánto tarda en liarla.

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