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lunes, 18 de junio de 2018

Valentino y la "suerte" están salvando a Yamaha


364 días. Ese es el tiempo que, como mínimo, va a pasar desde la última victoria de Yamaha cuando arranque el próximo 24 de Junio la próxima carrera en Assen. Y fue precisamente en el mítico trazado holandés donde Valentino la consiguió, el 25 de Junio de 2017.
Lógicamente, si ningún piloto de Yamaha consigue la victoria en el próximo GP, pasaremos la barrera del año sin ganar en Yamaha, algo que no pasaba desde 2003, justo antes de que Valentino aterrizara en la marca para hacerla resurgir, porque estaban absolutamente perdidos hasta entonces.

Ahora, 15 años después, la historia se está repitiendo, aunque lógicamente entran en juego muchos otros factores. El “problema”, es que la clasificación general está “tapando” esta crisis en la que está sumergida la marca de los tres diapasones, y solo si te das cuenta y analizas lo que llevamos de temporada, te das cuenta de que la debacle la están salvando dos factores: el primero tiene nombre propio, Valentino Rossi; y el segundo lo podemos achacar perfectamente a la "suerte".

  
Para entender todo lo que se va a exponer, hay que irse un poco atrás en el tiempo, concretamente a principios de 2017.Tras un inicio prometedor, sobre todo con Maverick Viñales logrando 3 victorias en las 5 primeras carreras y con sensaciones más que positivas también en los test, todo empezó a torcerse a partir de Montmeló. Es cierto que en Jerez ya hubo un aviso de lo que se venía encima, pero se atribuyó a neumáticos defectuosos. El verdadero punto de inflexión fue, como digo Montmeló, donde Valentino ya avisó de que algo no funcionaba con altas temperaturas, ya que la electrónica se comía casi literalmente los neumáticos con temperaturas altas, creando un desgaste que hacía imposible cualquier opción incluso de pódium para los pilotos oficiales, sobre todo pasada la mitad de carrera.
Esto no hizo más que confirmarse con Assen, donde Valentino consiguió la victoria pero con una temperatura más bien fría (incluso cayeron algunas gotas), y muchos más ejemplos de desastres en carreras donde la temperatura del asfalto era alta.

Tras cambiar el chasis, que tampoco había sido un acierto, se señaló, como bien había indicado ya Valentino meses atrás, a la electrónica como culpable de una temporada para el olvido, donde un piloto satélite y debutante como Zarco llegó a “pintar la cara” a los oficiales en alguna carrera al no tener esos problemas en la electrónica.
Con este panorama, en la pretemporada de este año se centraron en intentar solucionar este problema, pero lamentablemente cualquier atisbo de mejora fue solamente un espejismo. Y es que, tras siete carreras disputadas, el problema sigue estando presente en la M1.

Porque, analizando los resultados y cómo han llegado, llegas a la conclusión de que esos dos factores que he comentado al principio, son los que están haciendo que a esto no se le llame por su nombre: una crisis como una Catedral.

RESULTADOS

Aquí van los números, que no engañan, pero te aportan muchos datos si no nos basamos únicamente en el ‘resultadismo’ que tan de moda parece estar últimamente. Nos vamos a centrar en los dos pilotos oficiales, Valentino y Maverick, y en uno satélite, Zarco.

De 21 podium posibles, si tenemos en cuenta que son 3 pilotos los que estamos analizando por 7 carreras disputadas, se han conseguido 7. Es decir, un tercio. De ellos, 4 han sido conseguidos por Valentino (todos ellos terceros puestos en Qatar, Le Mans, Mugello, y Montmeló), 1 por Maverick (un segundo puesto en Austin), y 2 por Zarco (dos segundos puestos en Termas y en Jerez).
En el resto de carreras, Valentino tiene un 0 en Termas por un huracán que pasó por allí, un 4º en Austin, y un 5º en Jerez; Maverick tiene dos 6º puestos (Qatar y Montmeló), un 5º en Termas, dos 7º (Jerez y Le Mans), y un 8º en Mugello; mientras que Zarco tiene un 8º en Qatar, un 5º en Austin, un 0 en Le Mans, un 10º en Mugello, y un 7º en Montmeló.


QATAR
TERMAS
AUSTIN
JEREZ
LE MANS
MUGELLO
MONTMELÓ
VALENTINO
NF
MAVERICK
ZARCO
NF
10º


Estos se traduce en la general en Valentino estando 2º con 88 puntos, Maverick 3º con 77, y Zarco 4º con 73.
Y en la clasificación de marcas, están en tercer lugar con 124 puntos, detrás de Ducati (132) y Honda (150).

Es decir: el viejo que se tiene que retirar porque está arrastrándose por los circuitos y solo vende gorras es la primera Yamaha y marcha 2º en el Campeonato, siendo por tanto el que más puntos ha dado a Yamaha; el que según muchos debería llevar el peso del desarrollo de la Yamaha solo ha conseguido 1 podium de 7 posibles y está 3º; y el que tenía que tener una Yamaha oficial sí o sí está 4º y desaparecido en las últimas dos carreras.
Curioso, cuanto menos.


¿POR QUÉ HAY “TANTOS” PODIUM? FACTOR VALENTINO ROSSI

Como hemos visto, Valentino ha sido el que más pódium ha conseguido (4 de 7). Sobre todo en las 3 últimas carreras, ha sido el que ha dado la cara por Yamaha y el que ha evitado que no se escriban ríos de tinta acerca de lo que precisamente estoy escribiendo hoy. Mientras sus compañeros naufragaban perdidos peleando por el Top 10 (ni tan siquiera Top 5), él ha sabido dar ese plus a base de trabajo, esfuerzo, y talento, que le ha permitido aprovechar las ocasiones para encadenar 3 podium consecutivos.
Que él los domingos hace magia y saca algo de donde parece no haberlo (ayudado por supuesto por su equipo), es algo a lo que ya estamos acostumbrados, pero que en este caso nos hace perder un poco la perspectiva de lo que está pasando realmente. Porque no nos engañemos, no es normal ver a Maverick tan atrás, es evidente que hay problemas. La diferencia es que mientras uno se queja de todo y de todos al terminar las carreras, otro lucha y trabaja para dar lo mejor posible y seguir dando pasitos hacia delante, que también es verdad que poco a poco los está habiendo.

¿Os imagináis que la situación fuera al revés? Madre mía, qué de artículos habría escritos hacia lo perdido que estaría Valentino y lo bien que lo estaría haciendo Maverick con una moto que no da más. Pero claro… es al revés y no interesa.

¿POR QUÉ, ENTONCES, ESTÁN LOS TRES ENTRE LOS CUATRO PRIMEROS? FACTOR “SUERTE”

Tampoco hay que engañarse. Exceptuando Mugello, en las otras dos carreras (Le Mans y Montmeló) el pódium ha llegado por un error de pilotos que iban delante. En Le Mans, cayeron Iannone y Zarco, que en principio tenían más ritmo, y en Montmeló, Dovizioso.
Sí, ya sé que hay que estar ahí y que él lo está consiguiendo mientras que otros no, ya lo he dicho anteriormente, pero es innegable que sin esos errores, no hubiesen llegado los pódium, y estaríamos hablando ahora de una situación muy diferente.
Y no solo estos tres pódium, porque el de Zarco en Jerez vino por el accidente entre Jorge, Dovizioso y Dani. Zarco se encontró con un segundo puesto, Valentino con un quinto, y Maverick con un séptimo. Sin ese incidente, hubiese sido un 4º, un 7º y un 10º.

Ellos no pueden tirar más y por eso no están teniendo ceros. El de Valentino vino por lo que vino, y el de Zarco por intentar apretar de más (y eso que él no arrastra el problema principal que sí arrastran Valentino y Maverick en sus M1 oficiales).
Es decir, no pueden tirar mucho más porque se cargan el neumático, y por eso no están teniendo opciones de luchar por ninguna victoria.

Por ello, esa “suerte” (entrecomillado porque al final son errores o lances de carrera), de que pilotos con más ritmo se estén yendo al suelo y los pilotos de Yamaha por tanto estén consiguiendo mejores resultados, es lo que hace que los tres estén entre los cuatro primeros.
Por un lado ellos terminan, como digo, en mejores posiciones, y por otro los pilotos que cometen esos errores no puntúan y por consiguiente están por detrás en la general.



En definitiva, todo se está viendo maquillado por un genio con un 46 y un factor ajeno a Yamaha que les está permitiendo sumar más puntos de los debidos, pero tienen que reaccionar ya.
La pelota lleva en el tejado de Iwata desde hace tiempo, cuando Valentino y Maverick dijeron que ellos ya habían dado las indicaciones y era la fábrica la que tenía que llevarlas a cabo.
Pero si esa reacción no llega, me temo que estaremos ante una de las crisis más grandes de la marca, lo que afectará no solo a las opciones de los pilotos a luchar por el Mundial, sino también en consecuencia a un menor espectáculo para los aficionados.

Sea como sea, espero que lo hagan rápido y no se cieguen por estos resultados, porque no son más que espejismos, y después el golpe puede ser mayor. Se dan pequeños pasos, pero no son suficientes. Yamaha: ponte las pilas.


2 comentarios:

  1. Estoy totalmente contigo en la idea que defiende esta entrada. Creo que sin la experiencia y buena gestión que hace Valentino los domingos (incluyendo el porcentaje de suerte de quien la busca) Yamaha estaría públicamente en una grave crisis, o dicho de otra manera, su crisis sería mucho más evidente.

    En el otro lado del box tenemos a Viñales, que con la misma moto que su compañero no es capaz de sacar el mismo rendimiento. Entiéndase misma moto sin tener en cuenta que hay otro componente importante, peso del piloto, altura, estilo de conducción, etc.

    Pero Viñales se limita a decir que cuando la moto está perfecta él esta siempre delante, no sé si debería estar tan orgulloso de hacer tal afirmación.

    Viñales es un gran piloto, pero no tengo tan claro que sea un campeón (frase que tan de moda está últimamente). Valentino, Marc, Jorge tienen actitud de campeones, no se rinden nunca, no culpan a nada, trabajan y demuestran lo que son. Quizás a Maverick le cayó una losa demasiado pesada sobre él, ser el nuevo anti-Márquez y tener al lado al Dios de las motos, que además cada domingo le "pinta la cara".

    Saludos Borja, gran artículo!

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    1. Muchas gracias Sergio por leerla y por dejar tu comentario, que además es muy acertado ;)

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