Sepang 2015: El día que se cayó un mito

Todo empezó una semana antes del Gran Premio de Sepang, en Australia, a 5000 km de distancia. Marc Márquez gana la carrera, por delante de Jorge Lorenzo, Andrea Iannone, y Valentino Rossi, en la que muchos aseguran que es la mejor carrera de la historia del motociclismo.

Bueno, esa afirmación que para nada comparto, tampoco la comparte Valentino, quien en rueda de prensa del jueves previa al GP de Sepang carga contra Márquez por sus cambios de ritmo sospechosos. Le acusa de ayudar a Jorge Lorenzo a ganar el campeonato, y se crea una tensión entre ellos bastante grande (por si hacía falta más). No contento con eso, Vale saca la hoja de tiempos de Australia y se la muestra a la prensa italiana, para demostrar que Marc realmente hizo unos cambios de ritmo extraños. Marc, por el contrario, defiende que lo hizo por un sobrecalentamiento en la rueda delantera que le hacía bajar el ritmo para enfriarla.

Dejando de lado el hecho de que Márquez tenía ritmo de sobra para ganar cómodamente en Phillip Island, hasta aquí bien, cada uno defiende lo suyo. Y, para mí, Valentino quizá se equivoca al ir tan descaradamente a por Marc en la rueda de prensa, ¿o era al revés?

Sea como sea, Márquez dice que va a hacer su carrera el domingo. Quedaos con este dato porque es importante. Vale, me espero a que terminéis de descojonaros sabiendo lo que pasó después en carrera.

¿Ya? Seguimos. Marc hace unos tiempos por vuelta en entrenamientos que pocos pueden seguir, quizá sólo Dani Pedrosa. Rueda con bastante facilidad en el 2.00.5, haciendo ese tiempo constantemente y, al parecer, sin demasiados apuros. Incluso en el warm up del domingo sigue haciendo ese paso por vuelta. También quedaos con el dato de ese ritmo.

Aquí llega lo importante: salen los pilotos, Dani en cabeza, Marc detrás, Valentino tercero, y por detrás las dos Ducati y Jorge. Éste último, todo hay que decirlo, hace dos adelantamientos en la primera vuelta y se ventila a los Andrea, y después a final de recta tras el primer paso por línea de meta, adelanta a Valentino con bandera amarilla. Con este dato no hace falta que os quedéis, como tampoco lo ha hecho la prensa española. ¿O es que se lo han pasado por el forro de los cojones? No, no creo, son todo unos profesionales.

Sigue la carrera, vuelta 2, pasan Dani, Marc, Jorge y Vale. A Marc le marcan quién tiene detrás, y curiosamente se cuela en la curva 3. Recalco el “se cuela”, que no se deja pasar, no seáis mal pensados.

Valentino le adelanta pocas curvas después en un intento por irse detrás de Jorge, aunque lo lógico era pensar que Marc le volvería a pasar y se iría tras los dos primeros puesto que tenía ritmo de sobra para ello (¿recordáis los 2.00.5?). Pero nada más lejos de la realidad, parece que Marc tiene problemas para rodar en esos tiempos en carrera, y lo hace en 2.01.7 más o menos. Valentino ante esto, le adelanta, pero Marc se la devuelve. Así durante un par de vueltas, donde Marc lucha con toda su alma y haciendo adelantamientos al límite por una tercera posición a falta de 18 vueltas para el final. Algo, por otra parte, totalmente normal en el motociclismo sin duda alguna.

En estas vueltas, Valentino casi se va al suelo y le echa una mirada a Marc digna de estudio, y más tarde le hace un gesto con la mano del que dudo lo que significa. No sé si sería un “vete a tomar por el culo” o un “me estás tocando los cojones más de lo debido”. Quizá ambas.

Y la traca final, en la séptima vuelta Valentino pierde los papeles (porque los pierde) y echa a Marc de la trazada, que se salda con un encontronazo en el que el de Honda se va al suelo. En ese momento pensé (si es que a gritarlo en alto se le puede llamar pensar): “¡¡¡Toma!!! ¡A la mierda ya el puto niñato! ¡Que se joda!”.

Pensamiento que a los 10 segundos cambió por un: “La que has liado pollito”.

Digamos que fue algo así:

 

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Más allá de mis reacciones, la carrera continua y Dani se marca un GP impresionante y gana, seguido de Lorenzo y de Valentino, que cruza la meta sabiendo lo que se le viene encima.

¿Mi pensamiento? En un primer momento pensé que le había tirado de una patada. Un primer momento que duró varias horas para ser honesto. Esa patada fue Trending Topic y los entendidos del motociclismo de antes de ayer (en ese momento de ese mismo día), insultaban a Valentino y la prensa se cebaba y escupía años de frustración nacional hacia el 46.

Hablan de patada, no se molestan en ver el video a cámara lenta donde se ve claramente que no existe dicha súper patada, y siguen con la cantinela durante días obviando muchísimos detalles de la carrera y el fin de semana. Detalles que ahora voy a exponer:

Marc hace los siguientes tiempos por vuelta:

 Vuelta 2: 2m 0.818s 

Vuelta 3: 2m 2.003s

Vuelta 4: 2m 1.360s

Vuelta 5: 2m 2.107s 

Vuelta 6: 2m 1.938s

Curioso que un piloto que rueda en 2.00.5 en entrenamientos, no sea capaz de hacer ese tiempo nada más que en su segunda vuelta. Más curioso aún que sea justo antes de que le indiquen que Jorge está tercero, en la que se cuela (claramente), y hace un 2.02.0.

A partir de ahí, son tiempos en los que hace 2.01 largos, incluso otro 2.02. Muchos pueden decir: “es que le estorbaba Valentino cuando le volvía a adelantar”. Si realmente tienes ritmo para irte, no te vuelven a pasar, te vas y no das la más mínima oportunidad. Si lo tienes y quieres imponerlo, claro. Pero en este caso, no lo quería imponer, se ve claramente por sus tiempos que lo único que quería era ralentizar a Valentino para hacerle perder tiempo con Jorge, y así favorecerle de cara a conseguir el campeonato.

No me sirven las excusas de depósito lleno, de neumáticos fríos, y otras gilipolleces que intentan justificar ese ritmo. Marc ha demostrado varias veces que es capaz de tirar desde la vuelta 1, y si no os convence os recuerdo el año 2014, donde nos quejábamos la mayoría de que las carreras eran aburridas porque no había nadie que le tosiera, y Sepang no es la excepción.

Y ahora viene una de mis partes favoritas, la de la gente (incluyamos “periodistas”) que dice: “¿Es que Marc no puede adelantarle?” “¿Es que no puede luchar por una tercera posición sólo porque es Valentino?”

Bien, quitémonos la bandera española de los ojos y seamos serios. ¿Desde cuándo un piloto se pone a luchar a 18 vueltas del final por un tercer puesto? ¿No es más lógico, si de verdad tenía problemas como dijo Marc, que se quedase detrás de Valentino y esperase a sentirse más cómodo para adelantarle y tirar? ¿O, en el caso de que no pudiese, jugársela en las últimas vueltas, como hicieron en Aragón Valentino y Dani? Ahí, en Aragón, ningún rossista (y no os toméis el “ningún” al pie de la letra porque lógicamente no conozco a todos) se quejó, fue una lucha limpia, donde ambos hicieron su carrera, mantuvieron su ritmo de entrenamientos, y se dejaron los cuchillos para las últimas vueltas.

Marc hizo todo lo contrario: no hizo su carrera, no mantuvo su ritmo de entrenamientos, y los cuchillos los sacó a nada más y nada menos que a 18 vueltas del final.

¿Qué pretendía? Yo pienso que quería hacer perder tiempo a Valentino y a falta de 10 vueltas para el final largarse a intentar coger a Jorge y Dani, porque tenía ritmo para ello, y así decir que hizo su carrera. Pero le salió mal, porque Valentino perdió la paciencia, le echó, y aquí es donde me la juego: fue Marc el que inició el contacto con la rodilla de Valentino por abrir gas cuando no tenía espacio, y estando ya casi en el suelo

(se puede apreciar viendo la dirección cerrada de la rueda delantera de Marc), Vale saca la pierna en un instinto de “quita coño”.

Por supuesto no justifico la acción de Valentino, está mal echar a un piloto fuera de la pista, pero no existe patada, por mucho que la gente lo repita y que se hagan más y más memes, no existió y nunca existirá. Yo lo siento por la gente que se esfuerza en meter esta idea en la cabeza de la gente, pero es así.

“¿Pero y qué pasa, que Valentino en Motegi 2010 pudo hacer eso con Jorge cuando se jugaba el Mundial y Márquez no puede?” Volvemos a lo mismo: Valentino tenía su ritmo y lo mantuvo, y atacó en las últimas vueltas. Eso con el añadido de que faltaban 3 GP y Dani (con quien se jugaba el Mundial Jorge) estaba lesionado. Todo lo que añadan a partir de aquí, son argumentos sin sentido ninguno…

La conclusión es que, como se dijo, este día se cayó un mito. Pero ese mito no fue Valentino, que ya lo es, sino uno que todavía estaba tomando forma: Marc Márquez.

Un piloto que sin opciones de ganar toma partido de una manera tan clara y con el único objetivo de joder el Mundial a otro piloto, no se merece ser reconocido tan sólo como piloto profesional. Porque hasta donde yo sé, un profesional sale cada carrera a dar el máximo y ganar, no a comportarse como un niñato rabioso a joderle la carrera a otro.

Además, lo de que se cayese no es sólo metafórico, es también literal (perdonad el chistaco).

Por suerte, y aunque nosotros nos hayamos tenido que tragar opiniones de lo contrario, la opinión general del mundo del motociclismo es la de que Marc no se comportó como el campeón que fue, sino de una manera muy poco deportiva. Incluso hubo mucha gente (Nico Abad lo explicó en su blog) dijo que mucho tardó Valentino en echarle, y que su comportamiento no fue adecuado, pero tampoco el de Marc al meterse en una guerra en la que no tenía nada que ver, por mucho que le pesase, la de ser el próximo Campeón del Mundo.

Esto, para mí, es prueba más que suficiente como para darse cuenta de que el motociclismo está con Valentino Rossi, y para mí eso, después de la derrota que supuso esa carrera, fue la mayor victoria del domingo.